domingo, 8 de mayo de 2011

En el Perú (Parte VIII): Cusco

Cusco: Cosco: El Ombligo


El ombligo, el centro del mundo, así veían los Incas a esta ciudad que funcionó como capital del Imperio Inca, hasta que Pizzarro la "Conquistó" y la introdujo en el mundo occidental.

Sábado 13 de noviembre de 2010, luego de regresar de Machu Picchu y pasar la noche en un hostal que conseguí pasada la media noche me prepare para pasar el último día en la tierra de los Incas y en el Perú, luego de varias semanas alejado de los mios, del país y la cotidianidad.

Lo primero labores logísticas, un nuevo Hostal (Garcilazo por 35 sl), ya que los dos en los que había dormido no me gustaron, medicamentos (el malestar estomacal continuaba), recoger ropa de la lavandería, comunicarme con mi novia, confirmar los vuelos de los días siguientes y separar el tour turístico por la ciudad (City Tour) para la tarde, ya que me había dado cuenta que caminando por mi cuenta no sabria donde ir.

Luego una corta caminata, tiendas de artesanías, los obligatorios "souvenires", y un almuerzo de 3 soles (unos $1900 pesos colombianos).


Plaza de Armas, Cusco


Sobre las dos de la tarde me encontré con Martina, una compañera del tour a Machu Picchu, con quien acordé hacer el recorrido. Acabamos de pagar el tour que costo 15 soles, más el Boleto Turístico por 70 soles, que vende la municipalidad y permite el ingresos a los diferentes sitios. Abordamos el Bus donde una guía nos dio las indicaciones por partida doble: en ingles y español.

El tour visita varios construcciones Incas en la ciudad y sus alrededores, proporciona el transporte en bus y la guianza, y ocupa toda la tarde. Se que muchos pensaran que los toures no son la mejor manera de conocer estos lugares, pero en realidad me permitó conocer de manera rápida y económica los diferentes sitios, ya que en principio no hubiese sabido a donde ir. También me permitió compartir con diferentes personas e incluso hacer buenos amigos, como sucedió con Martina a quien envío un cálido saludo.

El primer sitio visitado fué Coricancha, al interior de la ciudad y no muy lejos de la plaza de armas; donde para ingresar debimos pagar 10 soles adicionales, ya que no es parte de los bienes de la ciudad y pertenece a los monjes Dominicos, quienes tienen allí un iglesia, un monasterio y otras cosas relacionadas.


Coricancha

La del centro es probablemente la piedra
más pequeña de las construcciones Incas,
tiene cerca de una pulgada de altura.
Coricancha fué uno de los emplzamiento más importantes para los Incas, donde funcionaban varios templos, entre ellos el templo del Sol (Inti) cuyas paredes estuvieron revestidas con oro, allí el trabajo en la piedra es el más elaborado de todo lo que alcancé a ver, donde las piedras encajan de manera perfecta unas con otras y las superficies son muy uniformes y bien trabajadas. 

Para mi fue el sitio que más me entristeció visitar ya que aun es de la Iglesia Católica y no de los peruanos y porque fue parcialmente destruido y sobre sus bases se yerguen las toscas paredes de una iglesia construida por los invasores españoles, resumiendo de manera gráfica lo acontecido tras la invasión. 


Uno de los templos de Coricancha
El segundo sitio fue Sacsayhuaman que según la guía fue centro ceremonial y fortaleza a la vez, se caracteriza por estar protegida por una serie de tres muros megalíticos que siguen un trazado en zigzag, uno exterior y dos internos, que resguardan las demás construcciones y que concuerdan muy bien con la hipótesis de fortaleza militar. De acuerdo con la guía la disposición en zigzag está inspirada en el rayo y el lugar funcionaba también como templo a este; pero personalmente encuentro que esta disposición se relaciona con su función militar, de forma similar a algunas construcciones medievales europeas. Desde luego en este campo lo que se conoce está basado en gran medida por las suposiciones de los investigadores, por lo que no hay certeza al respecto.


Sacsayhuamán, hay quienes dicen que algunas de estas rocas representan la huella de un puma



Sacsayhuaman

Túnel en Quenco



Luego visitamos el emplazamiento de Quenco, a pocos minutos de recorrido, sitio que integra muchas rocas naturales dentro de las construcciones, con algunos sitios subterráneos, se piensa que tenía una función ceremonial.  



Monolito en Quenco



Quenco


El siguiente sitio fue Puca Pucara, la fortaleza roja, ubicada en lo alto de una colina, fue un punto estratégico ya que era paso obligado entre el Cusco y otras regiones del imperio, entre sus funciones estaba la de controlar el paso en los caminos Incas.


Puca Pucara


Vista desde Puca Pucara
El último sitio que visitamos fue Tambomachay, considerado como el baño del Inca, que se cree funcionaba como su sitio de descanso. Tiene un complejo sistema de irrigación que alimenta permanentemente una fuente con tres caídas de agua, donde las dos últimas tienen el mismo flujo, una buena muestra de la gran capacidad arquitectónica de los Incas y de su dominio del agua.

Tambomachay, bella muestra de como los Incas incorporaban los rasgos del paisaje en su arquitectura


Calle céntrica de Cusco
Al finalizar la tarde regresamos a Cusco y luego de un mate en uno de los cafés del centro me despedí de mi nueva amiga Martina. Poco después me encontré con Isau, el colega con el que trabajé en el bosque, cenamos y fuimos a una discoteca a disfrutar de  algunas cervezas mientras escuchábamos música tecno mezclada con cumbias y otros aires folclóricos con los que los jóvenes rumbean allá.


Entrada la madrugada regresé al hostal a preparar las cosas para mi regreso a casa, ya que a las 6:00 am debía estar en el aeropuerto para emprender el viaje de retorno, el que me tomó todo el día y que tuvo sus contratiempos, como un largo retraso en el vuelo a Lima y el prejuicio de un guardia de seguridad en Cusco, que dada mi nacionalidad y mi pinta se dedico a buscar insistentemente en mi maleta productos que tuviesen "coca" como el decía con su maliciosa mirada.




Sobre las 8:30 pm aterricé en Bogotá y sobre las 10:00 pm finalmente regresé a casa luego de un largo mes, dejando atrás al Perú, sus bosques y sus fantásticos seres, su deliciosa gastronomía, la amabilidad de sus gentes, su pisco, sus cervezas y las grandiosas maravillas de su pueblo Inca.